EL DESPERTAR ESPIRITUAL ES UN EVENTO CÓSMICO DE CARÁCTER EVOLUTIVO

Autora: Norma Del Río / 21 de febrero de 2022

Querido Humano, además de los temas sobre el discernimiento y la desinformación que ya he compartido contigo, hoy quiero comenzar a compartir esa información que tal vez puede ser valiosa para ti que estás en la búsqueda de entender con mayor profundidad y a detalle qué es el despertar espiritual y cuáles son esas cualidades que posee este fenómeno de carácter evolutivo que hoy están experimentando miles de humanos en el planeta.

Si eres de las personas que están en la etapa inicial de este momento, y aún tienes dudas de si esto es real o no para ti, este contenido te ayudará a resolver con certeza algunas dudas que te detienen a sumergirte en este proceso así que, sin más preámbulo, vamos a iniciar nuestro recorrido.

Hoy en día se escucha hablar con relativa frecuencia en el mundo, acerca del fenómeno cósmico conocido como el Despertar Espiritual, especialmente en esos espacios de las redes sociales que ofrecen información metafísica, esotérica o espiritual. Así mismo, este fenómeno está enlazado al suceso conocido por la comunidad de humanos despiertos como la Ascensión Planetaria a la quinta dimensión (5D), evento de carácter evolutivo que está sucediendo en nuestro Planeta, la Tierra, y el cual está experimentando la especie humana, tanto de forma individual como colectiva.

Si eres de las personas que siente el llamado para ser parte de este maravilloso hecho evolutivo, es importante que conozcas ese contexto Cósmico y Galáctico en el que se está desarrollando este fenómeno para obtener una visión más amplia e integradora sobre el mismo e incluso, en caso de que tengas dudas sobre si es real o no, conocer cómo dicho fenómeno se relaciona con esos ciclos que nuestro Planeta permanentemente realiza a pesar de que la mayoría de las veces ni siquiera te detienes a pensar en esto.

La idea es ayudar a que tu mente mátrix programada para negar este tipo de eventos, tenga algunos elementos creíbles para su desconfiada configuración, de manera que puedas asimilar la importancia de su trascendencia para la especie humana, así como la manera en que éste evento contribuye a una profunda transformación de tu existencia y de tu vida cotidiana, si te dispones a alinearte con esa nueva energía 5D que ya está impactando desde hace tiempo a nuestro Planeta.

La evolución de la Humanidad es impulsada por la Conciencia del Universo-Cosmos

Una de las verdades de este siglo XXI que tendremos que aceptar como raza humana es que, seamos conscientes o no de esto, nuestra evolución como humanos es impulsada por la Fuerza de esa Conciencia Inteligente que administra al Universo-Cosmos. Contrario a lo que nos han programado para creer, nuestra evolución trasciende y sobrepasa a las fuerzas sociales y culturales movilizadas por las decisiones y las acciones de los humanos, y desde luego que poco tiene que ver con ese enfoque darwinista que hemos aceptado sin chistar.

La limitada y muy reducida configuración del método de nuestras ciencias, nos ha hecho creer que la evolución de la humanidad se estimula sólo por el desarrollo de aleatorios procesos biológicos, así como por los acontecimientos históricos de los humanos que han impulsado el desarrollo de las diversas culturas del planeta y, por tanto, de las sociedades que registra nuestra historia.

Esto ha sido porque la percepción de la realidad que hemos heredado del sistema se sostiene principalmente en una visión enfocada en el mundo de la fisicalidad en su modo más denso que es la materia, tal y como la conoces que, además, es percibida como determinista, y en dónde se ha ignorado la influencia de nuestro ordenado entorno cosmológico como un elemento fundamental e indiscutible de dicha evolución.

La ciencia actual nos ofrece explicaciones sobre la evolución de la humanidad que excluyen de forma decisiva ese elemento espiritual de la existencia, lo ha hecho intencionalmente para exiliar este elemento de la espiritualidad hacia la manipulada zona de las religiones, evitando a toda costa con esto integrar en sus explicaciones teóricas, la evidente y tan negada realidad espiritual que configura sin lugar a dudas la compleja historia de la realidad humana, así como del planeta con todos sus seres vivos.

Es por esto, y por otras razones de peso, de las cuales algunas ya he mencionado en los artículos anteriores, que este fenómeno del Despertar Espiritual, así como el magnánimo Evento de la Ascensión Planetaria a la 5D, no están siendo difundidos por ningún gobierno, ni tampoco en ninguno de los medios de comunicación que solemos reconocer como oficiales, no obstante que estos eventos son dos hechos históricos de cualidades cósmicas sin precedentes, que reconfiguran radicalmente el curso de la evolución de nuestra especie, dando forma a una nueva e inédita realidad más elevada y nunca antes vista, ni mucho menos experimentada por nuestra civilización.

Los procesos cíclicos del planeta son una ruta evolutiva

Si te detienes un poco a reflexionar sobre esta idea de que los procesos cíclicos en los que Gaia está inmiscuida, son uno de los elementos que configuran la ruta evolutiva de nuestro planeta, te darás cuenta con certeza que, esta idea es fácilmente sostenida en un delicado pero evidente sentido común. 

Para comprender el proceso de Despertar Espiritual como Evento Cósmico, es necesario recordar al menos dos situaciones con respecto a nuestro Planeta la Tierra; la primera es que ésta realiza movimientos cíclicos que poseen distintas cualidades; y la segunda, es que, además de formar parte de un Sistema Solar, éste a su vez pertenece a la Galaxia que conocemos con el nombre de Vía Láctea, en donde nuestro sistema solar se ubica en el sector Mu de uno de sus cuatro cuadrantes.

 

Así como nuestro Planeta está alineado a nuestro Sol y, por tanto, gira alrededor de este, nuestro Sol junto con todos los planetas que lo configuran, está alienado y orbita alrededor de Alcione, que es la estrella central de la constelación de las Pléyades la cual se encuentra a 400 años luz de la Tierra.

Alrededor de Alcione, orbitan siete soles, cada uno de estos con sus correspondientes planetas girando a su alrededor, y es en la séptima y última órbita de Alcione, donde se encuentra nuestro sistema solar. Así pues, la Tierra, al ser parte de nuestro Sistema Solar, el cual es el séptimo sol de las Pléyades, es uno de los planetas que pertenece y habita en esta constelación.

Espero que puedas darte cuenta que ese delicado orden que hay en el Universo, en donde la Tierra ocupa claramente un lugar en el contexto de la Galaxia junto con otros sistemas estelares, nos evidencian la contundente realidad espiritual de la existencia, pues, al hacer consciente que somos parte del equilibrio que configura el tejido estelar de la esfera celeste por donde transita la Tierra, podemos sin duda percibir la magnificencia del Creador, al mismo tiempo que nos revela que hay complejos misterios que no hemos resuelto aún acerca de quiénes somos, y cuál es el propósito trascedente de nuestra existencia entre otras cosas.

Pensar en estos elementos tan importantes y trascendentes de la realidad, de los cuales el sistema se ha encargado de invisibilizar en las explicaciones que nos oferta acerca de lo que es la existencia, es una de los componentes del proceso individual que se activa en esta experiencia conocida como Despertar Espiritual. Revisemos ahora los movimientos cíclicos del planeta para que puedas comprender el por qué este fenómeno del Despertar Espiritual tiene un origen ante todo cosmológico.

Los movimientos de la Tierra son cíclicos

Nuestro planeta realiza movimientos cíclicos diversos como parte de su naturaleza estelar galáctica. Dos de estos movimientos son muy conocidos para nosotros los humanos, uno es el de rotación en donde la Tierra gira sobre su propio eje dando origen al día y la noche y otro es el de traslación donde gira alrededor del sol dando origen a las estaciones del año.

Hay un tercer movimiento que realiza la Tierra conocido como la Precesión de los Equinoccios, este movimiento es mucho más lento que los dos anteriores y lo realiza en torno al sol central de la Galaxia.

Así pues, se le llama precesión de los equinoccios, al cambio lento y gradual en la orientación del eje de rotación de la Tierra. Este movimiento del eje de la Tierra, lo realiza nuestro planeta en sentido contrario a las agujas del reloj generando el ciclo equinoccial que tiene un tiempo aproximado de 26 000 años; ciclo que en la comunidad Astrológica es conocido como el Gran Año Cósmico que da origen a las doce Eras Astrológicas.

Por más de 300 mil años, la Tierra realizó su recorrido cíclico en una misma frecuencia vibracional sin cambio alguno; para que puedas comprender más o menos lo que esto significa, es algo así como si los humanos hubieran sintonizando por 300 mil años, la misma estación de radio escuchando una y otra vez la misma canción.

Sin embargo, fue en diciembre del 2012 que nuestro planeta culminó este ciclo de 26,000 años, elevándose a una octava superior, y con este evento, entre otras situaciones, se activó en el Planeta el inicio del desmantelamiento de lo que se conoce como la realidad tridimensional o la mátrix 3D.

Aproximadamente a partir del 2012, la Tierra dirige su viaje por el cosmos por una nueva e inédita zona cargada de luz fotónica, dando con esto inició a la transición del cambio de frecuencia vibratoria de una densidad tridimensional hacia una densidad pentadimensional.

Un gran ciclo termina y una nueva Era comienza

Como puedes darte cuenta, los ciclos que nuestro planeta experimenta afectan directamente a la humanidad; a pesar de que esta información no la escuchas en los medios oficiales ni es noticia relevante para quienes nos gobiernan, esto no significa que el efecto cósmico con el que Universo impacta sobre la Tierra, a través de sus ciclos, no tengan relevancia para todos y cada uno de los habitantes del planeta.

Debes ser consciente que, como humano, estás viviendo un momento cósmico crucial que se despliega de este gran ciclo equinoccial de 26 000 años que ha culminado el planeta, pero al mismo tiempo, estamos iniciando una nueva era Astrológica conocida como Era de Acuario que tendrá una duración aproximada de 2,160 años (26,000 años dividido entre 12 signos zodiacales).

Así pues, es en este contexto de los ciclos cósmicos que experimenta el planeta Tierra, donde el gran Despertar Espiritual se desarrolla para los humanos como una primera etapa del proceso preliminar al Gran Evento de naturaleza evolutiva conocido como la Ascensión Planetaria hacia la quinta dimensión, pero, sobre este tema, hablaremos más adelante en otro artículo.

En otras palabras, el Universo nos impulsa a una transición o cambio dimensional planetario, lo que significa que literalmente estamos entrando a un nuevo campo vibratorio; con la finalización de este gran ciclo ingresamos en una ruta energética por la cual no había transitado nunca la Tierra.

Nuestro Planeta va al encuentro de un cinturón de fotones, un sistema energético que nos permitirá experimentar el cambio dimensional del Planeta, es decir, nuevas formas y diferentes niveles de energía nos están impactando y esta energía tan especial del Universo afectará directamente en nuestra conciencia.

Nuestra forma de percibir la realidad está dando un giro excepcional que nos develará verdades y elementos de la existencia que desconocíamos por completo; una nueva conciencia se está gestando para los humanos y ésta se caracteriza por contenerse en una sustancia energética mucho más elevada, llena de compasión y benevolencia excelsa.

Hasta este momento hemos hablado sobre el Despertar Espiritual primordialmente desde un enfoque astronómico en el contexto cósmico y galáctico en el que nuestro planeta ocupa un lugar, junto con la humanidad; en nuestros siguientes artículos toca explicar este fenómeno desde un enfoque psíquico de la conciencia para que puedas comprender la trascendencia de su significado, además de ofrecerte información relevante sobre cuáles son las etapas y fases del Despertar Espiritual. Nos vemos en nuestro próximo contenido.